Los proyectos Rivetz quieren mantenerlo protegido durante todo el día de miradas indiscretas. Es un conjunto de herramientas de última generación para aprovechar el entorno de ejecución confiable (TEE) para proteger sus secretos, sus finanzas y su privacidad. Funciona como una bóveda pero, además, está oculto en su teléfono y solo se puede acceder a él mediante contraseñas que usted conoce. Está construido de forma tan segura que piratearlo será una tarea casi imposible.